La sarcoidosis es una afección en la que aparecen en el cuerpo pequeños parches de células inflamadas, llamados granulomas. Generalmente aparecen en los pulmones y en los ganglios linfáticos cercanos. La sarcoidosis también puede afectar otras partes del cuerpo, incluyendo los músculos, los ojos y la piel.
Muchas personas con sarcoidosis no tienen ningún síntoma. Pero en otros, la afección puede causar daño a largo plazo a los órganos. Por ejemplo, algunas personas tienen tejido cicatricial similar a una fibra en los pulmones, lo cual puede causar problemas respiratorios. La sarcoidosis puede desarrollarse con el tiempo y causar síntomas que duran años o puede aparecer y desaparecer rápidamente.
Las personas que tienen una variación de la sarcoidosis, llamada síndrome de Lofgren, pueden tener síntomas que incluyen inflamación de los ganglios linfáticos, fiebre, dolor, nódulos enrojecidos y dolor articular. El síndrome de Lofgren generalmente tiende a desaparecer por sí solo en uno o dos años.
Más afroamericanos que caucásicos tienen sarcoidosis en los Estados Unidos.
Signos y síntomas
Muchas personas con sarcoidosis no tienen ningún síntoma.
Algunas personas con sarcoidosis en los pulmones, llamada sarcoidosis pulmonar, pueden tener los siguientes signos y síntomas:
- Dificultad para respirar
- Fatiga y debilidad
- Pérdida de peso
- Dolor en el pecho
- Tos seca
- Inflamación de los ganglios linfáticos alrededor de los pulmones
Cuando la sarcoidosis afecta otras áreas del cuerpo además de los pulmones, los síntomas pueden incluir:
- Inflamación de los ganglios linfáticos
- Protuberancias rojas en los brazos, la cara y los glúteos
- Fiebre
- Hinchazón y dolor en los tobillos y las rodillas
- Infecciones de los ojos, incluyendo conjuntivitis
- Hígado agrandado o inflamado
Causas de la Sarcoidosis
Los investigadores no saben exactamente qué causa la sarcoidosis. Algunos piensan que se debe a un sistema inmunológico hiperactivo que responde con demasiada fuerza a un organismo invasor. Otros investigadores creen que la sarcoidosis puede serlo:
- Heredado
- Causado por una infección
- Causado por alergenos que se inhalan o toxinas que se encuentran en el medio ambiente
Factores de riesgo
A cualquier persona le puede dar sarcoidosis, aunque es más común entre las siguientes:
- Personas de ascendencia escandinava, irlandesa, africana o puertorriqueña
- Personas entre 30 y 40 años de edad
- Mujeres
Diagnóstico
La sarcoidosis puede ser difícil de diagnosticar. Es posible que tenga que ver a varios médicos diferentes, incluyendo un neumólogo (especialista en pulmones). Para comenzar, el médico descartará otras afecciones que podrían estar causando los síntomas, como la artritis reumatoide. Los siguientes exámenes pueden ayudar a diagnosticar la afección:
- Radiografía de tórax
- Pruebas de la función pulmonar
- Biopsia
- Exámenes de sangre
- Broncoscopia, que examina el interior de los pulmones
- Tomografía computarizada, resonancia magnética u otros exámenes imagenológicos
- ECG (electrocardiograma)
Tratamiento
Aproximadamente la mitad de todas las personas con sarcoidosis mejoran sin tratamiento. Para otros, los medicamentos, como los corticosteroides, pueden ayudar a reducir:
- Hinchazón
- Erupciones cutáneas
- Dolor
- Fiebre
- Problemas pulmonares
Los cambios en el estilo de vida pueden ayudar a controlar las complicaciones, como los Cálculos renales u otros daños. Aunque las terapias complementarias para la sarcoidosis no se han estudiado mucho, pueden ayudarle a sentirse mejor como parte de un plan de tratamiento general.
Estilo de vida
Si fuma, deje de hacerlo. Dejar de fumar puede aliviar los síntomas pulmonares.
La sarcoidosis puede ser una enfermedad de larga duración, por lo que es importante consumir una dieta saludable llena de frutas, verduras y granos enteros.
Haga ejercicio regularmente. Asegúrese de preguntarle a su médico antes de comenzar un nuevo programa de ejercicios, especialmente si la sarcoidosis le deja sin aliento.
Medicamentos
Los corticosteroides, como la prednisona, se consideran el tratamiento de primera línea para reducir la inflamación de la sarcoidosis. Las píldoras de corticosteroides pueden tener algunos efectos secundarios graves si se toman en dosis altas durante períodos prolongados. Los efectos secundarios pueden incluir:
- Presión arterial alta
- Diabetes
- Úlceras de estómago
- tuberculosis
- osteoporosis
Su médico probablemente le sugerirá que se haga chequeos y pruebas con regularidad.
Otros medicamentos que a veces se usan para la sarcoidosis incluyen aquellos que suprimen el sistema inmunológico, tales como:
- Metotrexato
- Azatioprina (Imuran)
- Infliximab (Remicade)
Sin embargo, no hay estudios a largo plazo sobre si estos medicamentos funcionan para tratar la sarcoidosis.
Otros medicamentos que se pueden usar incluyen:
- Medicamentos antipalúdicos: como la hidroxicloroquina, que se utiliza cuando la piel está afectada. Puede ser tóxico para los ojos.
- Talidomida: en estudio para la sarcoidosis, utilizada para mejorar la función pulmonar y tratar problemas de la piel.
- Terapias tópicas: incluyendo cremas esteroides, gotas para los ojos, corticosteroides nasales e inhaladores de esteroides.
Cirugía y otros procedimientos
Sólo los casos muy graves necesitan cirugía, como un trasplante de pulmón o de corazón.
Nutrición y suplementos dietéticos
Los investigadores no tienen ninguna evidencia de que las hierbas o suplementos traten la sarcoidosis, pero usted puede decidir usarlos como parte de su plan de tratamiento general. Coméntele siempre al médico acerca de las hierbas y suplementos que esté usando o esté considerando usar, debido a que algunos suplementos pueden interferir con otros medicamentos.
Estos consejos nutricionales ayudarán a su salud en general:
- Coma alimentos antioxidantes, incluyendo frutas (Arándanos, cerezas y tomates) y verduras (calabaza y pimientos).
- Incluya alimentos ricos en Magnesio y bajos en calcio, como cebada, salvado, maíz, centeno, avena, soya, arroz integral, aguacate, banano y papa.
- Evite los alimentos refinados, como los panes blancos, las pastas y el azúcar.
- Coma menos carnes rojas y más carnes magras, pescado de agua fría, tofu (soya, si no hay alergia) o frijoles como proteínas.
- Use aceites saludables, como aceite de oliva o aceite vegetal.
- Reduzca o elimine los ácidos grasos trans que se encuentran en los productos horneados comercialmente como galletas, galletas saladas, pasteles, papas fritas, aros de cebolla, donas, alimentos procesados y margarina.
- Evite la cafeína, el alcohol y el tabaco.
- Beba de 6 a 8 vasos de agua filtrada diariamente.
- Haga ejercicio por lo menos 30 minutos al día, 5 días a la semana. Pregúntele a su médico antes de comenzar una nueva rutina de ejercicios.
Los siguientes suplementos también pueden ayudar a la salud general:
- Un multivitamínico diario: contiene las vitaminas antioxidantes A, C, E, el complejo B y oligoelementos, como magnesio, calcio, zinc y Selenio.
- Ácidos grasos omega-3: como el aceite de pescado, 1 a 2 cápsulas o 1 a 3 cucharadas de aceite, 1 a 3 veces al día. El aceite de pescado parece ayudar a reducir la inflamación en todo el cuerpo. Los peces de agua fría, como el salmón o el fletán, son buenas opciones para comer. Si toma suplementos, consulte a su médico porque pueden aumentar el riesgo de sangrado, especialmente si toma anticoagulantes, como warfarina (Coumadin), clopidogrel (Plavix) o aspirina. Comer pescado no causa el mismo riesgo.
- bromelina: mezcla de enzimas derivadas de la piña, 500 mg al día. La bromelaína también puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Pregúntele a su médico antes de tomarlo, ya que puede aumentar el riesgo de sangrado y puede interactuar con otros medicamentos. La bromelina a menudo se combina con la cúrcuma.
- Suplemento probiótico (que contiene Lactobacillus acidophilus): 5 a 10 mil millones de UFCs (unidades formadoras de colonias) al día. Estas bacterias “amigables” ayudan a mantener la salud gastrointestinal. Si usted está tomando medicamentos inmunosupresores, o tiene un sistema inmunológico suprimido, hable con su médico antes de tomar probióticos. Usted debe refrigerar sus suplementos probióticos para obtener los mejores resultados.
Hierbas
Las hierbas pueden fortalecer y tonificar los sistemas del cuerpo. Al igual que con cualquier terapia, usted debe trabajar con su proveedor de atención médica para que le diagnostiquen su problema antes de comenzar cualquier tratamiento.
Los estudios no han encontrado ninguna hierba que trate específicamente la sarcoidosis. Sin embargo, las siguientes hierbas pueden ayudar a la salud general. Hable con su médico antes de tomar cualquier hierba o suplemento si usted tiene sarcoidosis.
- Extracto estandarizado de cúrcuma (Curcuma longa): 300 mg, 3 veces al día, puede ayudar a reducir la inflamación. La cúrcuma puede aumentar el riesgo de sangrado e interactuar con otros medicamentos, así que pregúntele a su médico antes de tomarla.
- Extracto estandarizado de uña de gato (Uncaria tomentosa): 20 mg, 3 veces al día, puede ayudar a reducir la inflamación. Las personas con Leucemia no deben tomar uña de gato. Las personas con enfermedades autoinmunes, como artritis reumatoide o lupus, tampoco deben tomarla. La uña de gato interactúa con algunos medicamentos, así que pregúntele a su médico antes de tomarla.
Homeopatía
Algunos informes de casos sugieren que los remedios homeopáticos pueden mejorar el bienestar general de las personas con sarcoidosis. Un homeópata experimentado puede prescribir un régimen para tratar la sarcoidosis que está diseñado específicamente para cada individuo. Los remedios primarios usados por los individuos que reportaron mejorías en sus síntomas incluyen:
- Tuberculinum bovinum
- Berilio
Otros remedios homeopáticos que se han utilizado clínicamente para la enfermedad son los siguientes:
- Carcinosina
- Eufrasia
- Grafitos
- Leuticum (sífilis)
- Bacillinum
- Sepia
- fósforo
- Álbum de arsénico
Otras Consideraciones
Embarazo
Las mujeres con sarcoidosis todavía pueden quedar embarazadas. Pero si está pensando en tener un bebé, hable con su médico. Algunos de los medicamentos utilizados para tratar la sarcoidosis, como el metotrexato, pueden ser perjudiciales para el bebé. Hasta el 65% de las mujeres pueden ver que sus síntomas mejoran durante el embarazo, mientras que el 5% puede encontrar que los síntomas empeoran. Algunas mujeres pueden tener un brote de síntomas después de dar a luz. Las mujeres embarazadas con sarcoidosis deben evitar exponerse a los rayos X.
Pronóstico y complicaciones
La sarcoidosis se asocia con somnolencia diurna excesiva. Las complicaciones de la sarcoidosis generalmente ocurren sólo en los casos más graves y pueden incluir daño cardíaco, renal y pulmonar. El uso prolongado de corticosteroides puede causar:
- Úlceras
- Diabetes
- Presión arterial alta
- Osteoporosis
- Infecciones, como la tuberculosis.
El pronóstico para la mayoría de las personas con sarcoidosis es bueno. Sólo el 15% de las personas con sarcoidosis tienen síntomas que empeoran. Aproximadamente el 5% desarrolla problemas pulmonares graves, lo que aumenta el riesgo de muerte. Casi la mitad de todas las personas con sarcoidosis mejoran sin ninguna terapia. Los tratamientos utilizados en la actualidad, como los corticosteroides, a menudo ayudan a aliviar la inflamación asociada con la afección.
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